imagen destacada del post con un texto en el centro que dice ¿Por qué no existe la vitamina B4 en nutrición? y abajo del texto aparece el nombre del autor Omar Obando

¿Por qué no existe la vitamina B4 en nutrición?

Descubre en México la razón científica por la que la vitamina B4 no se considera parte de la nutrición actual y cómo afecta tu dieta en 2025.

¿Alguna vez te has preguntado por qué la numeración de las vitaminas del complejo B tiene saltos inexplicables? En este artículo exploraremos en profundidad la fascinante historia detrás de estas «vitaminas perdidas», centrándonos especialmente en el misterio de la vitamina B4 y otras que ya no forman parte de la clasificación nutricional actual.

El concepto fundamental de vitamina

Para entender por qué algunas sustancias dejaron de considerarse vitaminas, primero debemos comprender qué define exactamente a una vitamina. Según la nutrición moderna, una vitamina es:

  • Una sustancia orgánica esencial para el funcionamiento corporal
  • Que el organismo no puede sintetizar en cantidades suficientes
  • Que debe obtenerse a través de la dieta
  • Que actúa como catalizador en procesos metabólicos

Estos criterios, establecidos a principios del siglo XX, han evolucionado con los avances científicos. Cuando investigaciones posteriores demostraron que ciertas sustancias podían ser producidas por el cuerpo o no eran esenciales, perdieron su clasificación como vitaminas.

Historia del descubrimiento de las vitaminas

La historia de las vitaminas comenzó en 1917 cuando el equipo de Bernard McCollum descubrió la vitamina A mientras estudiaba el papel de las grasas en la dieta. Para 1920, Werner McCollum identificó la tiamina, llamada inicialmente «factor hidrosoluble B» para distinguirla de la vitamina A liposoluble.

Este sistema de nomenclatura generó el concepto de complejo B cuando se descubrieron otras sustancias con características similares, como la riboflavina (B2). La numeración se asignó según el orden de descubrimiento, lo que explica por qué existen vacíos en la secuencia actual.

El sistema de clasificación inicial

Originalmente, las vitaminas se clasificaban mediante un sistema simple:

  • Letras (A, B, C…) para diferenciar grupos principales
  • Números (B1, B2…) para variantes dentro de un grupo
  • La letra «H» para factores de crecimiento

El caso de la vitamina B4: la adenina

La sustancia que originalmente recibió el nombre de vitamina B4 fue identificada como la adenina, una base nitrogenada que forma parte del ADN y ARN. Su historia es un perfecto ejemplo de cómo evoluciona la ciencia nutricional.

¿Por qué la adenina dejó de ser vitamina?

Investigaciones posteriores demostraron que el cuerpo humano puede sintetizar adenina a partir de:

  • Glicina
  • Glutamina
  • Ácido aspártico

Al comprobarse que no era esencial obtenerla de la dieta, dejó de cumplir con los criterios para ser considerada vitamina. Sin embargo, la numeración ya establecida se mantuvo, creando el vacío entre B3 y B5 que conocemos hoy.

Funciones biológicas de la adenina

Aunque no es una vitamina, la adenina sigue siendo crucial para:

  • Formación de nucleótidos (ATP, ADP, AMP)
  • Síntesis de coenzimas (NAD, FAD)
  • Transmisión de información genética

Otras «vitaminas perdidas» del complejo B

El caso de la B4 no es único. Numerosas sustancias originalmente clasificadas como vitaminas B perdieron esta denominación al avanzar la investigación científica.

Vitamina B8 (Biotina)

Originalmente llamada vitamina H o coenzima R, fue objeto de múltiples investigaciones independientes que no se unificaron hasta años después. Hoy la conocemos como biotina (B7), aunque algunas fuentes aún usan las denominaciones antiguas.

Vitamina B10 (Ácido para-aminobenzoico)

El PABA (por sus siglas en inglés) es esencial para algunos microorganismos pero no para humanos, por lo que no cumple con los criterios de vitaminas. Sin embargo, sigue siendo un componente importante en algunos protectores solares.

Vitamina B11 (Carnitina)

Hoy clasificada como aminoácido, la carnitina fue considerada vitamina B11 hasta que se descubrió su naturaleza proteica y capacidad de síntesis corporal. Aún se comercializa como suplemento para el metabolismo energético.

Vitaminas con letras desaparecidas

No solo las numeradas han cambiado. Algunas vitaminas identificadas con letras también han sido reclasificadas:

  • Vitamina F: Mezcla de ácidos linoleico y linolénico (omega 3 y 6)
  • Vitamina G: Antiguo nombre de la riboflavina (B2)
  • Vitamina J: Nombre inicial de la colina
  • Vitamina M: Denominación primaria del ácido fólico (B9)

Tabla comparativa: Vitaminas originales vs. clasificación actual

Nombre originalClasificación actualRazón del cambio
Vitamina B4 (Adenina)NucleótidoSíntesis endógena
Vitamina B8 (Biotina)Vitamina B7Unificación de nomenclatura
Vitamina B10 (PABA)No vitaminaNo esencial para humanos
Vitamina F (Ácidos grasos)Omega 3/6Clasificación como lípidos
Vitamina MÁcido fólico (B9)Normalización

Consecuencias prácticas de estos cambios

Estas reclasificaciones tienen importantes implicaciones para:

  • Suplementación nutricional: Algunos productos aún usan nomenclaturas obsoletas
  • Educación en nutrición: Los textos deben actualizarse constantemente
  • Regulación alimentaria: Las etiquetas deben reflejar la ciencia actual

Ejemplo práctico: lectura de etiquetas

Un suplemento que mencione «vitamina B4» probablemente contenga adenina, pero técnicamente está usando una denominación incorrecta según los estándares nutricionales actuales. Esto puede generar confusión en consumidores.

Preguntas frecuentes sobre vitaminas desaparecidas

1. ¿Por qué no existe la vitamina B4?

La razón de este vacío en la numeración es que la sustancia originalmente llamada vitamina B4 (adenina) dejó de considerarse vitamina cuando se descubrió que el cuerpo humano puede sintetizarla. La denominación de «vitamina» se pierde cuando una sustancia no cumple los dos criterios fundamentales: ser esencial y no poder ser producida por el organismo en cantidades suficientes.

2. ¿Qué nombre recibe la vitamina B4?

La sustancia que alguna vez fue llamada vitamina B4 hoy se conoce como adenina, una base nitrogenada que forma parte fundamental del ADN y ARN. Aunque ya no se clasifica como vitamina, sigue siendo un componente crucial en numerosos procesos bioquímicos, especialmente aquellos relacionados con la transferencia de energía (ATP) y la información genética.

3. ¿Qué causa la deficiencia de vitamina B4?

Al no ser considerada vitamina, técnicamente no existe una «deficiencia de B4». Sin embargo, problemas en la síntesis de adenina podrían manifestarse con síntomas como fatiga extrema, alteraciones neurológicas o problemas inmunológicos, ya que afectaría la producción de nucleótidos. Estos casos son extremadamente raros y generalmente asociados a trastornos metabólicos específicos.

4. ¿Es peligroso consumir suplementos de «vitaminas perdidas»?

Depende de la sustancia específica. Algunas, como la carnitina (ex-B11), son suplementos seguros y ampliamente utilizados. Otras, como el ácido pangámico (ex-B15), han sido prohibidas en varios países por posibles efectos adversos. Siempre es crucial consultar con un profesional de la salud antes de consumir cualquier suplemento, especialmente aquellos con nomenclaturas obsoletas.

5. ¿Por qué se mantienen los huecos en la numeración?

La comunidad científica decidió mantener la numeración original por consistencia histórica y para evitar confusiones en la literatura médica acumulada. Cambiar la numeración cada vez que una vitamina es reclasificada generaría más problemas que beneficios, especialmente en la interpretación de estudios antiguos.

6. ¿Todas las vitaminas B fueron reclasificadas?

No, las vitaminas B1 (tiamina), B2 (riboflavina), B3 (niacina), B5 (ácido pantoténico), B6 (piridoxina), B7 (biotina), B9 (ácido fólico) y B12 (cobalamina) mantienen su estatus como vitaminas esenciales. Solo aquellas que no cumplían los criterios fundamentales fueron eliminadas de la clasificación.

7. ¿Cómo puedo asegurarme de obtener todas las vitaminas necesarias?

La mejor estrategia es mantener una dieta variada y equilibrada que incluya:

  • Cereales integrales (fuente de varias vitaminas B)
  • Frutas y verduras frescas
  • Proteínas de alta calidad
  • Lácteos o alternativas fortificadas

En casos específicos, bajo supervisión médica, podría considerarse la suplementación.

8. ¿Existe riesgo de confusión con las nomenclaturas antiguas?

Sí, especialmente en productos comerciales que usan terminología obsoleta para parecer innovadores o en información nutricional desactualizada. Es importante verificar siempre las fuentes y, ante la duda, consultar con un nutricionista cualificado.

Si quieres profundizar en este fascinante tema de forma visual, te invitamos a ver este video explicativo que complementa perfectamente la información del artículo:

Conclusión: La evolución del conocimiento nutricional

Los vacíos en la numeración de las vitaminas B son un testimonio fascinante de cómo avanza la ciencia nutricional. Lo que hoy damos por sentado mañana podría ser revisado, y eso es precisamente lo que hace apasionante el estudio de la nutrición.

La próxima vez que veas un suplemento con nombres extraños o nomenclaturas antiguas, recuerda que detrás hay una rica historia de descubrimientos científicos y revisiones constantes en pos de la precisión y la salud.